En la nueva era digital 2.0 nos ponemos a pensar lo omnipotentes que podemos ser al obtener todo al alcance de un clic: compras, viajes, música, conciertos, eventos, comida, etc. Y la lista sigue y sigue.
En este nuevo mundo de medios online, cada persona encontró su forma de pertenencia y cómo prevalecer en él. Las plataformas como Facebook, Instagram, YouTube o TikTok, nos han impulsado a viralizar nuestra voz; desde un emprendimiento, una story en tu lugar preferido en el mundo o un video con amigos. Para poder establecer el buen vivir de los internautas y establecer un balance en la forma de interconectarnos, existen normas que agilizan el proceso.
Sin embargo, la pregunta radica en qué sucede cuando esas normas no son iguales para todos.
Según un estudio publicado por AEDEMO, el 90% de las españolas cree que no hay igualdad de género, frente al 65% de los hombres. Queda en evidencia que la inclusión y la aceptación digital sigue a paso de hombre.
Migramos de medios offline para viralizarnos a lo online, donde se supone, no existen tantas restricciones, pero ¿es así? ¿Qué tanto se le permite ser a la mujer ante los medios digitales? No sabemos si tanto como se quisiera, ya que aún se debate en qué tono se debería hablar a las personas o qué es ideal mostrar. Aun así, las mujeres de la era digital empezaron a abrirse camino y a expresarse, convirtiéndose, en líderes de opinión y creadoras de su propio contenido. Desde el rol de madre, empresaria, estudiante, hija, amiga; cada una desde su lugar, encontró la forma de mostrarse al mundo de manera genuina.
En todos estos años nos topamos con mujeres emblemáticas, pioneras en el desarrollo. De la ciencia y la tecnología. Aquí te presentamos algunas de ellas:
Pilar Careaga y Basabe fue la primera mujer ingeniera en España, en 1929 (hay que tener en cuenta que hasta 1910 no se permitía a las mujeres cursar estudios universitarios en España). A su vez, fue también la primera mujer en conducir una locomotora de tren en nuestro país, como parte de sus prácticas universitarias. Sin embargo, no llegó a ejercer su profesión.
Adelina Álvarez Bartolomé fue la primera matriculada en ingeniería de telecomunicaciones, en 1952. Terminó la carrera junto a dos compañeras en el curso 1964/65: María de los Remedios Uriel Aguirre y María Teresa Vidal Marín. Ellas fueron tres en una promoción de 134 estudiantes. Hoy en día la proporción en la escuela de telecomunicaciones de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) es de 2,6 hombres por cada mujer.
Ana María Prieto es considerada la primera programadora española. Ejerció como tal a partir de 1963. Hoy en día las mujeres no llegan al 20% del total del alumnado matriculado en informática.
Nuria Oliver, Ingeniera Superior de Telecomunicaciones por la UPM, realizó el doctorado en el MIT, donde trabajó como investigadora. Ha ocupado puestos de responsabilidad en grandes empresas del mundo de las telecomunicaciones. Además, ganó el Primer Premio Nacional de Ingenieros de Telecomunicaciones (1994) y es, actualmente, una de las mujeres investigadoras en informática más citadas en España.
Articulo relacionado: Mujeres pioneras en el desarrollo de la tecnología.
En la época actual, las voces femeninas afortunadamente luchan para no ser ignoradas.
Las publicidades también se incorporan en esta lucha de inclusión y las mujeres adoptan un rol alfa.
Como gestionar la seguridad y hacer valer nuestros derechos es un aprendizaje importante y en la red existen multitud de recursos y herramientas para hacer frente a estos obstáculos.
Tal como diría William Shakespeare Ser o no ser, ese es el dilema de las mujeres ante la mirada de los haters en tiempos modernos. Para muchos, vivir del anonimato de las redes es la mejor forma de evitar el rechazo y el odio. No obstante, el precio que se paga es el temor y la duda de ¿qué habría sido si…? Por otro lado, la mirada más fuerte es vivir de las críticas para fortalecernos y querer traspasar las barreas de exclusión. Es un trabajo arduo que lleva a la indecisión y duda constante. Por fortuna, existen asociaciones que apoyan y acompañan a las mujeres en su inserción al mundo.
Aquí te mostramos el cambio que han dado:
Asociación Ellas vuelan alto: organización que nace para dar voz y visibilizar a las mujeres en el sector aeroespacial. Su objetivo es fomentar la igualdad en el sector aeroespacial, actuando en el ámbito político, académico, empresarial y social, tomando como base la Carta Magna de las Naciones Unidas.
Mujeres Tech: es una asociación de comunidades del sector tecnológico que busca despertar y potenciar el talento femenino y fomentar la presencia de más mujeres en el sector digital.
Asociación E-mujeres: es una organización feminista que pretende contribuir a la construcción de vías alternativas de pensamiento y gestión del conocimiento mediante un sistema que permita tejer redes sociales, redes digitales y estructuras o plataformas de liderazgo de las mujeres para impulsar la incorporación de las mujeres a la Sociedad de la Información.
Artículo relacionado: Mujeres tecnológicas.
En el Día Internacional de la Mujer no queremos dejar de mencionar que su nuevo rol actual es un legado que quedará para las próximas generaciones, ya que marca un antes y un después. Aceptar el cambio es un paso, llevarla a cabo son dos. Entre pares será más fácil e incluyendo a todos los sexos será superador.
Socio fundador de GMOL Solutions
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